Resumen:
Las actuales politizaciones indígenas en el Perú y Bolivia, más allá de su proyecto de recuperación cultural, obedecen fundamentalmente a las pautas de una incorporación al espacio público moderno. En rigor, de política indígena se trata. Los autores indagan el difícil tema de las categorías identitarias, argumentan que el nacer de una auténtica política indígena no legitima en absoluto una etnicización del análisis y subrayan cómo su auge ha producido un nuevo tipo de dirigente. Si al decir de Henri Favre, con la república “el indio se convirtió en ciudadano y cesó de existir”, digamos que actualmente el indígena volvió a existir para ser plenamente ciudadano.