Descripción:
Este trabajo de investigación busca comprender cómo los procesos migratorios en el Cantón Cañar son vividos por las mujeres que no han emigrado. Así mismo, describe cómo esa experiencia migratoria de “quedare”, sumado a fenómenos histórico estructurales como la división sexual del trabajo y la problemática ambiental de la zona, configuran formas particulares de relacionarse y concebir el espacio habitado. Se entiende el espacio como una construcción social o una serie de representaciones en constante transformación y disputa. Son las mujeres campesinas, que viven el proceso migratorio “permaneciendo” en la localidad, el sujeto de este estudio; así como su relación con las organizaciones políticas, el cuidado ambiental, y sus arreglos familiares y sociales en la comunidad. La temática se aborda desde una perspectiva estructural en que la migración, las relaciones de género y los problemas ambientales son vistos como fenómenos que corresponden a una economía política global, que genera condiciones específicas de desigualdad y producción de territorios en los que las distintas exclusiones se entrecruzan de forma específica. De manera sucinta, esta investigación analiza la relación que se establece entre la experiencia migratoria del “quedarse”, el género desde una perspectiva relacional y el ambiente cómo construcción social fruto, entre otras cosas, de los dos fenómenos anteriores. Para ello se ha utilizado como principal herramienta la observación participante y la aplicación de cartografía social, en que las mismas mujeres presentan y describen el lugar habitado.