Descripción:
El libro nos indica que a la fiesta popular ha permitido, ya sea por hibridación o sincretismo, el encuentro de diversas culturas. Ha sido el espacio donde se construye una memoria que se imbrica con los sentidos humanos a través del color, el movimiento, la música, los lores, la abundancia de la gastronomía; también con las sensaciones y creencias más íntimas donde colectivamente nos respondemos -o intentamos hacerlo- sobre nuestra leve permanencia en la Tierra, sobre el vacío que se cuelga en la individualidad de los seres, sobre las historias y los mitos, donde un dios no es solamente la imagen que representa sino los muchos dioses que se esconden en sus manos.